Specie
26, octubre 2020
ANÁLISIS DE LOS SISTEMAS DE ATENCIÓN A VARAMIENTOS DE TORTUGAS MARINAS EN CANARIAS Y ESTRATEGIA PARA LA CREACIÓN DE UNA RED DE VARAMIENTOS DE TORTUGAS MARINAS PARA EL ARCHIPIÉLAGO CANARIO (FEDER)

En el archipiélago canario se han observado seis de las siete especies de tortugas marinas que existen en el mundo. Pueden diferenciarse por la presencia y número de escudos en su caparazón y las escamas de su piel. El caparazón, que es la clave de su éxito evolutivo, ha limitado la diversidad del grupo que se distribuyen por las aguas templadas, tropicales y subtropicales de todos los mares y océanos del mundo.


Las especies presentes en Canarias son:



  • Caretta caretta (Linnaeus,1758), tortuga boba.

  • Chelonia mydas (Linnaeus,1758), tortuga verde.

  • Eretmochelys imbricata (Linnaeus,1766), tortuga carey.

  • Lepidochelys olivacea (Eschscholtz,1829), tortuga olivácea.

  • Lepidochelys kempii (Garman,1880), tortuga lora.

  • Dermochelys coriacea (Vandelli, 1761), tortuga laúd.


Todas están amenazadas y se encuentran protegidas por diferentes catálogos. Es importante conocerlas mejor para conservarlas y no destruir sus hábitats. Las tortugas marinas se ven amenazadas por una variedad de factores naturales y antrópicos. Entre los factores naturales se incluyen la pérdida de huevos debido a la inundación de las playas o la erosión, la depredación en todas las fases del ciclo, las temperaturas extremas y algunas enfermedades. Entre los peligros antrópicos encontramos: la explotación comercial de huevos y tortugas para consumo humano, la destrucción de las playas de puesta debido a la urbanización y el turismo, la contaminación y las capturas accidentales en la pesca, enmallamientos, etc. ¿Sabías qué? El consumo de carne de tortuga es, además de ilegal, muy peligroso para los humanos ya que no se conoce ningún antídoto contra las toxinas presentes en su carne y pueden llegar a provocar la muerte.


La presencia de la tortuga boba, verde y laúd está bien documentada pero no ocurre igual con la tortuga carey, lora y olivácea de presencia más ocasional.


Cada especie presenta patrones diferentes, uno de los más conocidos es el de la tortuga boba que antiguamente utilizaba las costas de Fuerteventura para la nidificación entre los meses de junio a septiembre y actualmente son las que se observan frecuentemente en el archipiélago para alimentarse entre sus viajes a través de corrientes marinas y hacen una de las rutas de migración más largas de todos los animales marinos de la Tierra. La tortuga común es fundamentalmente carnívora, la morfología de la poderosa mandíbula le permite romper los caparazones de moluscos, crustáceos y otros invertebrados del mar tales como el cangrejo herradura. También se alimenta de peces, medusas, calamares, esponjas, camarones, erizos de mar y huevos de peces.


En Canarias, se ha confirmado la presencia de tortuga verde asentada en zonas poco profundas y con vegetación marina, especialmente cerca o dentro de los puertos. Los buceadores se las encuentran con frecuencia en bahías y costas protegidas como el Puertito de Adeje en Armeñime (Tenerife) y ocasionalmente en los puertos deportivos de Mogán y Puerto Rico en Gran Canaria. Sin embargo, rara vez se ha registrado la presencia de tortugas verdes en mar abierto. La tortuga verde invierte la mayor parte de su tiempo en su alimentación. Esta se basa en algas marinas que crecen en aguas de poca profundidad, aunque también comen medusas, cangrejos, caracoles y gusanos. Es la única tortuga marina que es principalmente herbívora. No obstante, en los primeros años de vida son carnívoras, comen gusanos marinos, crustáceos e insectos acuáticos, además de pastos y algas. La morfología de sus mandíbulas es perfecta para la ingesta de vegetación. Esta especie es muy importante a nivel ecológico ya que favorece la distribución de nutrientes que recoge en zonas ricas y deposita en otras más pobres.


La tortuga laúd es la tortuga marina más grande que existe y la única superviviente de la familia Dermochelys. La especie con más diferencias con respecto al resto de tortugas marinas. Se distribuye por las aguas templadas y frías de todo el mundo. Visita las Islas Canarias con frecuencia. Se encuentra en peligro crítico de extinción. En Canarias su presencia es común, sobre todo en los años que abundan las medusas, y en Fuerteventura se han constatado varias nidificaciones. Gracias a que es capaz de mantener una temperatura corporal más alta que la del agua que la rodea, puede habitar zonas más frías que el resto de especies de tortugas marinas. La tortuga laúd es fundamentalmente carnívora, se alimenta principalmente de medusas de gran tamaño. Es muy curioso el tamaño que llegan a alcanzar teniendo en cuenta la dieta tan baja en proteínas que llevan.


Del resto de tortugas presentes en Canarias se conoce poco y son difíciles o raras de observar. Por eso, si observas alguna tortuga marina contribuye con la ReDPROMAR y reporta el avistamiento #unetealaredpromar. Además puedes descargarte el póster de tortugas en la zona de documentos de la web de redpromar.com


VARAMIENTO DE TORTUGAS MARINAS


En el archipiélago canario varan o se localizan alrededor de 200 tortugas marinas al año, aunque el número de varamientos es distinto entre años e islas.


La demarcación canaria cuenta con una red de varamientos de cetáceos que ya está constituida y en funcionamiento desde hace años, mientras que en el caso de las tortugas marinas aún no se ha constituido ni implementado, siendo cada isla la encargada de atender los varamientos de forma independiente. El organismo responsable en cada isla (Cabildos Insulares) ha desarrollado su propio sistema de atención de varamientos de tortugas marinas, adaptándose al número de varamientos y a los recursos disponibles. Estos sistemas varían entre sí, tanto en complejidad y estabilidad, como en las metodologías de recogida de datos, entre otros puntos.


Una primera revisión de los sistemas desarrollados en cada isla, así como del análisis de los datos recogidos, ha reflejado una importante pérdida de información a nivel tanto insular como archipelágico, provocada principalmente por la falta de coordinación entre los sistemas de atención a varamientos de cada isla, así como por la falta de estandarización en las metodologías de recogida de datos.


Por ello, se considera que existe una fuerte necesidad de mejorar, estandarizar y unificar las metodologías de recogida de datos, así como de fomentar la colaboración y coordinación entre todos los organismos responsables (Cabildo Insulares y Gobierno de Canarias).


De acuerdo a las Estrategias Marinas, la homogenización y coordinación de las redes existentes es esencial para la obtención de información básica para la identificación y evaluación del impacto antropogénico sobre las poblaciones de cetáceos y tortugas. Dentro de las Estrategias Marinas para la Demarcación Canaria, existe el Plan de seguimiento: “Monitorización de varamientos de cetáceos y reptiles”, que incluye mamíferos y tortugas marinas. Este programa estatal, vinculado con directivas y convenios internacionales (Directiva Marco Europea de la Estrategia Marina, MSFD), trata de dar respuesta a las carencias identificadas en la monitorización de cetáceos y tortugas en Canarias.


Ante esta situación la Dirección General de Lucha contra el Cambio Climático y Medio Ambiente del Gobierno de Canarias ha puesto en marcha el pasado junio un proyecto consistente en el “Análisis de los sistemas de atención a varamientos de tortugas marinas en Canarias y estratégia para la creación de una red de varamientos de tortugas marinas para el archipiélago canario”, cofinanciado por el Programa Operativo del Fondo Europeo de Desarrollo Regional (FEDER) Canarias (2014-2020).


Para ello, se contrató a la “Asociación para el Desarrollo Sostenible y Conservación de la Biodiversidad – ADS Biodiversidad” que durante nueve meses tendrá como objetivo principal de trabajo establecer una estrategia adecuada para la creación de la red de varamientos de tortugas marinas en el archipiélago canario, así como el análisis de la información recopilada hasta el momento.


VARAMIENTO DE UNA TORTUGA LAÚD EN FUERTEVENTURA (22/01/2020)


El pasado miércoles 22 de enero de 2020, el personal de la escuela de kite surf localizó a 1Km de la costa de Matas Blancas (Pájara, Fuerteventura), el cadáver de una tortuga laúd (Dermochelys coriácea) de gran tamaño flotando a la deriva. Losalertantesarrastraron a la tortuga hasta la costa y dieron aviso al personal de medioambiente del Cabildo de Fuerteventura, cuyos agentes se presentaron en el lugar para proceder a su retirada y traslado hasta la Estación Biológica de La Oliva. Personal de la ULPGC pertenecientes al Proyecto INDICIT II (“Desarrollo del Indicador ‘Impacto de basuras marinas en tortugas marinas y biota’ en Aguas Europeas”)se desplazó hasta el lugar para llevar a cabo la disección del animal y el estudio detallado de la presencia de basuras ingeridas.


La presencia de esta especie en aguas de Canarias es esporádica y generalmente asociada a la llegada de bancos de medusas, pero la aparición de animales varados en tan buen estado es inusual y una gran oportunidad para poder aumentar los conocimientos sobre una especie tan enigmática que lleva surcando los mares desde la era de los dinosaurios. Por ello, se aprovechó la ocasión para tomar muestras biológicas que permitan conocer su población de origen (estudios genéticos), ver el nivel trófico en el que se alimenta(estudios de isótopos estables), o estudiar la acumulación de contaminantes en sus tejidos (estudios de toxicología).


La tortuga no presentaba ninguna lesión, patología o signo externo ni internoque pueda indicar la causa de su muerte, aunquesi se pudosaber que el animal presentaba una baja condición físicaal llegar a aguas de Canarias, puesto que tenía muy pocas reservas de grasa, dónde se estuvo alimentando en un banco de medusas en aguas cercanas a Fuerteventura.


Del análisis del tracto digestivo, se observó la presencia de medusas (probablemente Pelagia noctiluca) recién ingeridas, junto con restos de sebadales (Cymodoceanodosa) y una gran diversidad de basuras: una bolsa de plástico transparente de 20x30cm (tipo bolsa de la fruta de supermercado), fragmentos de cuerdas, redes y nylon, una colilla y fragmentos de bolsas y envoltorios plásticos de diversos tipos y colores. Es muy poco probable que estas basuras causaran la muerte del animal, puesto que no se detectó ningún signo de obstrucción ni lesiones en el tracto digestivo causadas por estas. Los investigadores de la ULPGC han concluido que los elementos encontrados en el digestivo del animal fueron ingeridos indirectamente mientras la tortuga se alimentaba en un banco de medusas localizado en una corriente de deriva, lugar donde se acumulan gran cantidad de basuras, principalmente fragmentos de material plástico, así como restos de sebadales liberados por las tormentas recientes de las praderas cercanas.


Finalmente agradecer a todos los implicados en este evento, escuelas de kite surf, personal del Cabildo de Fuerteventura y personal de la ULPGC, su inestimable colaboración para poder conocer un poco mas sobre una especie tan enigmática como la tortuga laúd, así como las importantes amenazas que están afectando a la fauna marina.